Esmalte epoxi sin disolventes de dos componentes. Fácil aplicación, liso y tiende a autonivelarse. No se raya, resistente a los golpes y a los detergentes.
Esmalte alquídico para la protección de superficies metálicas donde se desee un acabado de gran durabilidad y resistencia. Se puede aplicar sobre otras superficies
debidamente imprimadas como plástico, yeso o madera. Buen poder de cubrición. Buena adherencia. Gran duración. Colores luminosos. Uso industrial. Acabado brillante, satinado y mate